Préstame tus ojos
te dejaré mi piel.
Regálame un arco
iris renovado
para dar otros
colores a mis sueños.
Me sumergiré en tu
lago cristalino
y nadaré por sombras
sinuosas
acariciando luces,
apagadas hace
tiempo para mí.
Quiero seguir
siendo tu pupila,
prender tus
ilusiones con mis manos
ser tu guía,
no perderte y
perderme.
Sí, nuestro amor
es ciego igual que todos,
no ve más allá del
suave tacto.
Si me prestaras
tus ojos
sabría por fin el
tamaño exacto de tu boca.